La mayoría de las personas piensan en “La Oración del Señor” como si fuese la oración del “Padre Nuestro” que Jesús le enseñó a Sus discípulos. Talvez ésta oración fue el tipo de oración que Jesús oraba regularmente, pero en realidad es un modelo de oración que Jesús nos enseñó para hablar con Dios – una guía para que oremos.  Y que podríamos llamarla “La oración de los Discípulos.”

Hay otra oración en las Escrituras que de verdad es “la Oración del Señor.” Es una oración que Jesús oró la noche antes de su crucifixión.  Está en Juan 17.

Antes de que Él sacrificara Su vida en la Cruz por nuestros pecados, Jesús oró por aquellos que entregarían sus vidas a Él.  Jesús le pidió específicamente al Padre Celestial que hiciera ciertas cosas con Sus seguidores.

La primer cosa que Jesús pidió en oración fue por nuestra protección:

“Yo no voy a seguir en el mundo, pero ellos sí van a seguir en el mundo, mientras que yo me voy para estar contigo. Padre santo, cuídalos con el poder de tu nombre, el nombre que…” – Juan 17:11 (DHH)

La palabra que Jesús usó para “cuídalos” quiere decir “guardar, proteger, mantener la vigilancia, mantener en custodia y preservación.”  Es una palabra que puede usarse para describir el cuidado que damos a nuestras posesiones más valiosas.  Las cosas que valoramos las pretejemos – la ponemos en un lugar seguro.

Al Jesús estar alistándose para morir por los pecados del mundo y regresar al cielo, Él sabia que, Sus discípulos, enfrentarían peligros, amenazas y tentaciones en el viaje de la vida.  Sabiendo esto, ¡Jesús le entrego nuestra protección a Su Padre!  Él oró para que fuésemos protegidos “por el poder de Su nombre.”

El sabio escritor de Proverbios nos recuerda de la protección que el gran nombre del Señor nos da:

El nombre del Señor es una torre poderosa a la que acuden los justos en busca de protección.” – Proverbios 18:10 (DHH)

Cuando vengan amenazas y peligros a tu vida, recuerda que Jesús ya pidió por nuestra protección.  Está seguro que Dios, tu Padre Celestial, tiene el poder para cuidarnos.  Corre a Su nombre clamándole a Él. Descubrirás que Él será tu torre fuerte en medio de los problemas.

Pastor Dale

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